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Cuando mueren las flores: Miquel Martí (Negrín), otro de los imprescindibles...

Cuando mueren las flores: Miquel Martí (Negrín), otro de los imprescindibles... Miquel Martí (Negrín). Un tipo excepcional; un amigo entrañable. ¿Por qué mueren tan jóvenes las personas buenas? Tal vez porque están cansadas de vivir en un mundo tan feo, que dice Manu Chao.
20 de marzo de 2008, 7,15 horas de la mañana y, mientras tecleo una demanda al tiempo que gambeo por las noticias de google, me pita un SMS, que, por la hora y el día (jueves santo hoy, fallas aún humeantes después de la cremà de anoche), anuncia algo grave. El texto: “... miguel martí ha fallecido...”.
Miquel ha muerto, como esperábamos desde hacía unos días los amigos. En los resúmenes del google de esa hora de la mañana, sin embargo, la vida mediática continúa y emborrona las páginas de los teletipos un criminal ex alcohólico y ágrafo, entrado en años y canas que, convicto y confeso y amo del mundo mundial, celebra la guerra de Irak como “noble y necesaria”, tras cinco años de sufrimiento y muerte de un millón de militares y civiles iraquíes y 4000 americanos… Entonces me viene a la cabeza aquello del Lichis que popularizó la María Jiménez: “... y el diario no hablaba de ti..., ni de mi...” El diario nunca habla de las personas anónimas; ni de las malas ni mucho menos de las buenas. Y Miquel era de los buenos, de los mejores, o de los imprescindibles, que diría Bertolt Brecht. De Miquel no hablarán los diarios, pero quedará en el recuerdo de los que le conocimos y tuvimos el placer y el privilegio de compartir algunos ratos con él. Era un tipo excepcional, y eso se dice muchas veces de los que mueren, pero esta vez no es un tópico. Miquel era diferente a lo que uno se encuentra por ahí. Un punto de difícil equilibrio entre inteligencia, bondad, sensibilidad y generosidad, un tío comprometido con sus amigos y con la vida. De esos que, por la voz, por los gestos, por la mirada, te mandan esas buenas vibraciones que te alegran el día, siquiera sea por momentos.
En el tanatorio el cerebro me negaba la imagen de Miquel allí, inmóvil, presente pero ausente, como en otro lugar, tal vez en un garbeo por Porto, allá por el puente de Doña María, parpadeando el asombro de un contraluz mágico reflejado en el Duero cuando se reune con el Atlántico, o de paseo por la playa de Bellreguard en un atardecer del abril que hermana hondo con los peces, como dice Silvio, y que este año a el no le llegó, o por algún arrabal de Melilla fascinado en la frontera de civilizaciones. Una sensación de impotencia, de angustia infinita, de náusea que sólo se escupe llorando la amargura que ahoga el pecho. Y sin embargo continuaba el surrealismo mágico; no era posible que Miquel estuviera allí, tan ausente, tan varado ya en el pasado; la retina decía que sí pero el cerebro decía que no y no había manera..
Al día siguiente, centenares de amigos y conocidos seguimos el cortejo fúnebre desde el tanatorio por la carretera y la calle Sant Josep hasta la plaza y la iglesia abarrotada por un gentío difícil de recordar en Bellreguard. Y la despedida fue en la plaza, como lo quiso él, con la Muixeranga rompiendo el silencio denso que amasaba el dolor punzante de todos -y nunca antes había visto llorar a tanta gente- los que le acompañábamos en el regreso a la terra dels valencians, que siempre fue suya, tal vez a las elevaciones de Benirrama, donde parece que el sol nunca se pone. Y, cuando enmudeció la Muixeranga, la emoción me trajo la imagen de aquel día lejano en los ya lejanos 70 en que jugaba yo con su hermano Paco a fabricar artilugios para perseguir gatos mientras Miquelet, un taperot entonces, deambulaba por la calle José Burguete ya con la semi-sonrisa circunspecta tan característica y suya con la que cruzaría todas las edades de la vida, porque allí por els vigons de la antigua serrería de Primi andaba Miquel con el delantal-uniforme de la escuela nacional de la época del Tody y la leche en polvo gestionada por Doña Ramoncita y repartida en fila india. Y ya por el setenta y tantos vino lo del Disc Fórum en el Centre Parroquial, donde Jaume Costa y yo poníamos a Dylan, Seeger, Paxton, Raimon y otros de la beat-folk y de la nova canço que acaso una vez existió, aunque ahora parezca que no. Y también me viene al recuerdo aquella divertida historia del viaje iniciático a la Font a visitar a aquel santero del Palmar que resultó tan corto en teología y tan pasado de fe, como con los años reí con Miquel y Merce en alguna ocasión. Y luego, ya en un suspiro todos mayores para llegar al mundo de los adultos a buscarnos la vida. Y más años y años, y, aunque luego el montó su empresa y yo asesoraba a su principal competencia, siempre supimos separar lo profesional, en lo que cada uno iba a lo suyo, de la amistad, la que nos llevaba a tomar alguna cerveza o café allá a las mil, siempre con la alegría de reencontrarme con el amigo de la sonrisa de la Gioconda y las buenas vibraciones.
Y desde entonces, mucho, mucho tiempo, hasta que hace unos meses me enteré de su enfermedad.. Pero..., eso no era posible: ¡Cómo iba a morirse Miquel a esa edad y tan lleno de vida! Si eso podía pasar, algo no funcionaba en esta puta historia... Pero la puta historia, para los agnósticos, va de simple biología, de la tiranía biótica más cruel y de impotencia; para los creyentes, la cosa va de resignación, más y más resignación ante la injusticia que permite que se mueran las flores...
¿Cómo ha podido morirse Miquel? Parece un sueño, algo que nunca debió suceder. Y, ciertamente, así es, porque las personas como Miquel no mueren, quedan ancladas en el recuerdo de los que las conocimos, de los que tuvimos el privilegio de coincidir con ellas en el tiempo, en esa fracción millonésima del tiempo global de la especie humana. Imposible saber donde está ahora Miquel, acaso en ninguna parte, o tal vez en alguna enésima dimensión cuántica del espacio-tiempo que hoy por hoy se nos escapa y de la que ni Punset ni los científicos más eminentes nos dan pistas inteligibles. En todo caso, pasan los días y Miquel sigue presente, enredado en la memoria emocional de quienes le conocimos y disfrutamos del tiempo de una persona tan excelente y extraordinaria, que comprendió la importancia de la amistad, el valor añadido de los momentos de xarreta con una buena cerveza en la mano y la mente deambulando por mil recuerdos y anécdotas divertidas.
Ja se que no ho has fet volent, però, quina putada ens has fet, amic, quina putada! Quina buidor amarga ens has deixat als amics! En tot cas, gràcies per haver-te conegut, ha estat un plaer infinit, com serà el teu record.
Adéu, Miquel, amic, on estigues...

11 comentarios

Anónimo -

Sí,el comentari anterior l’he deixat per a que certa gent que pot ser haja entrat ací i que pot ser torne a entrar ,es done per al•ludida. Alguns dels quals tenen la poca vergonya de dir per ahí que varen ser amics de Miquel Martí. Utilitzen la paraula amistat oblidant que ella comporta quatre característiques fonamentals : confiança, empatia i sobretot, respecte i fidelitat. Així que quan torneu a parlar d’ ell utilitzeu bé les paraules.
I no , no parle des de la ràbia ni l’odi, parle des de l’orgull, l’orgull de tindre un pare que a la gent que considerava amiga( que no era poca) els regalava respecte, fidelitat, empatia i confiança,sense esperar res a canvi, quatre aspectes que de segur continuaria mantenint per els seus amics encara que aquestos ja no estigueren en aquest món.
Dins de la gent que es troba en l’excepció anterior estic feliç de veure a molts altres (que per sort superen en nombre als anteriors), que segueixen respectant-te i que actuen com segur com tu ho faries en el seu lloc,aquells que pase el que pase continuen valorant la teua amistat i tot el que es vas donar, aquells que poden dir amb orgull a la gent que han sigut amics de Miquel Martí.

Mar -

Contemplant tot el que està passant en estos moments hem ve a la ment una conversació que varem tindre un dia.
Et vaig preguntar:¿per qué sols els passen coses roins a les persones bones,perque no els passen desgràcies a les persones que fan coses roins? i varem arribar a la conclusió que hem vas contestar: a lo millor eixes persones ja tenen prou desgràcia en ser com són.
Cuanta raó tenies

Que mes dona -

Ja fa quasi un any que ens deixares i, estimat Miquel encara no hi ha cap de dia que hem vingues al cap. Per aquest mon tot segueix igual... be, coneguen-te conforme et coneixia, segur que parlariem molt de la situació actual que creua el pais... a tu aixo t´agradava molt. Quan haverem parlat ...quan.

Que mes dona -

Ja fa quasi sis mesos que t´en vares anar i no hi cap dia que no hem vingues al cap. Has deixat un buit ....

Merce -

Als amics de Miquel:



El dia 9 d'agost, en Benirrama, les cendres de Miquel faràn el llit a la figuera que ell volia plantar. Serà a la posta de sol que tant li agradava vore i de la que, ara, formarà part. Serà l'hora en la què tota classe de animalets que allí viuen tornen al seu refugi o niu per a descansar i dormir en pau.



Merce

LALY -

QUINA FALTA I QUIN BUIT ENS FAS MIQUEL!
Mai oblidarem els bons moments que hem compartit, dies i nits tots junts i algunes sense dormir, coixins de paraules fetes per compartir,
Tu sempre en un bon somriure, amb eixa noblesa que et caracterit-zaba, en el teu vocabulari no podia existir la paraula rencor, tant ele-gant…¿ Com diria jo?, un amic guapo per fora i guapo per dins; ad-mirable i digne d´admirar.
Totes les promeses que un día ens vam fer, sellades amb la mirada d´aquell que només té fe, no pateixes que les guardarem i si un día et fan falta, no pateixes no les oblidarem, les portem escrites a la pell.
Qui té el secret, qui pot provar d´aturar el món, qui pot evitar que cada moment es torne un record.
Entre mig dels vells poemes i de les nostres cançons, de la glòria del nostre passat he trobat aquesta hitòria, per la nostra amistat.
Només ens queda poder conservar els nostres records i la grandesa del teu cor.
Ningú no mor fins que no se l´oblida del tot. No hi han prou paraules per descriure el que sent. Enhorabona per haver sigut una gran per-sona i un bon amic.

Vicent -

Passen els dies i tot està igual. No m'ho acave de creure. En vens al cap quassi tots els dies i sent una pena infinita que m'ahofega. On estigues sempre seràs al cor dels amics. Eres una de les persones més meravetllosses que he conegut i trobe una injustícia que la mort cruel ens hatja deixat sense tú.

Miquel -

Amic, tinc coses a dir-te …
Amic, passen els dies i tinc coses a dir-te, amb veu de vidre.
Quan tot fineix al límit de l´absència, sobre el mur negre que separa el Fòrum de l´oratge.
Amic, ara que no hi ets, ara voldria dir-te coses que no es diuen mai. I ara la meua veu s´ha fet de pedra i no podré llançar el missatge rebel. Una flama immensa, fluorescent, em crema per dintre.
Cavalls negres posaran setge a la follia dels sediciosos, però la mare terra rebrà l´ofrena tan sols dels cavallers com tu.
Et precedeix la cendra als polsos i als sentits, i et perpetua un eco de cendra, ¡carn a fora!, i és l´eco de la pausa. Trista i dolenta pausa.
És com si Déu ratllara un nou equador, un altre paral.lel, un Danubi primíssim de silenci i el món es detinguera, tot esperant, ¡ Oh amic, volgut, estimat, quantes coses m´han quedat per dir-te!
Ja sé que les fulles seran cendra i que les rames ploraran ben nues, que es buidarà el teu riu d´aigües amargues i la mar s´omplirà d´estels i fulles.
Ja sé que els peixos besaran la vora quan la platja s´adorma entre despulles, i que les hores crearan un cercle quan s´esgarre la llum de tantes llunes.
Sé moltes coses més, però no importa, perquè duc al pit el vidre de les súpliques, per tal que es faça espill davant les roses quan el perfum, definitiu, s´ature.
La Mort ens deixa volves de cotó-en-pèl en cadascun dels sentits i són llavors les dolces llunyanies, fums imprecisos i aromàtics que ens rebleixen el cor i les pupil.les. I és ¡ Ara sí ! la VIDA.

Elegia al meu company i amic…

Pep -

Només dir-te que eres un dels tíos més genials que he conegut. Eixa bondat natural teua l'he trobat en poques persones i per això estic agraït pel privil.legi d'haver-te conegut en vida. Adéu, amic per sempre.
Pep

Eva -

Miquelet!
Soc una ploroneta i ho saps, tres anys son els que van a fer en contacte en malats o pacients, y amb tanta ilusio que yo tenia pr anar a fer les praciques a oncologia
i no podia parar de plorar quan em vas dir que estaves malalt. Jo sabia com acabaria tot i tenia que disimular quan estava en tu.
M'aguera agradat ajudar-te com a professional pero l'emoció m'impedia parlar en tu i només podia que amagar-me i plorar, pero cóm podia tindre la sang gela i parlar del que passaria si eres com el meu segón pare, sempre has sigut el meu confesor i ara era el meu torn i ser jo la teua confesora, perdona'm pero jo no podia, no tinc la teua força ni el teu valor.
Recode el dia que vaig anar a vore't al hospital,sabia que eren els teus ultims dies i li vaig dir a Surdo(al que tan volies)que volia despedir-me de tu, una de les persones a les que més volia. Volia ser forta secar-me les llagrimes i no plorar pero era superior a mi,pero em vaig quedar tranquila:per fi estaves descansan, ja no estaves patin i estaves dormin profundament. Entonces hem vaig sentir molt alivia, vaig parlar perfi en Mar en ella si que podia parlar sense posar-me a plorar,vam parlar del que passaria ara ,sabiem que tu ja no estaves amb nosaltres encara que seguires respiran.
Les teues "dos xiquetes" ens vam consolar perque ja habiem parlat de tot el que per dins pensavem i que ens fea por dir.
Eixe dia ja no vam plorar i vam decidir que els teus ultims dies serien els millors que passaria ningú en la seua vida, et vaig donar tot el amor que sentia i la teua cara ho reflexava,!que ben cuidaet estava el meu miquelet!
Estaves tan agust que no volies deixar-mos, vas estar 7 dies disfrutan dels nostres massatges, pero era la teua hora i tenies que anarte´n prompte.
El dia 20 ens vas deixar, la nit antes estaves més tranquil que mai.
Que diferent es reflexa en els llibres i en les pel.lícules aquesta situació, pero no em puc sentir trista, pues durant els 7 dies que vas estar "dormin" tenies a 20 persones al teu costat que no et van deixar ni un moment, i saps perque tenies a tanta gent amb tu? pues perque eres i sempre seràs EL MILLOR.
ara mes q mai tic mes forces x a continuar en els estudis, tu m'has ensenyat a ser mes forta.

Mar -

Molt bonica aquesta dedicatoria, la veritat es que mai l'oblidarem. Tindre'l al costat era un regal tan especial que no podria durar per sempre. L'he tingut molt poc temps al meu costat i encara no m'he donat conter del que he perdut.No estic tampoc enfadada amb ell perque m'ha donat tot el carinyo que es pot donar a una persona, puc dir que soc una de les persones més afortunades,no sols l'he tingut com a amic sino com a pare.
Sempre seràs el meu ejemple a seguir,espere algún dia pareixer-me a tu el més possible, a ser una de les millors persones que han existit.
L'altre dia comentavem que era com si no t'hen hagueres anat, cada dia seguixes sorprenet-nos, ho vas dixar tot en ordre per a que no ens faltara de res, perque soles tu sabies que pronte ja no estaries.
Moltes gracies per ser el millor pare del mon, sempre estaràs en mosatros.