En esta mañana de lluvia, ondas herzianas, sonidos, emociones... Return to Ommadawn.
Traspuesto del FB publicado ayer. Ahora reescucho en esta mañana de lluvia que eleva las ondas ad infinitum, que las traslada a viajes, mares, bosques, montañas, desiertos de pasiones de la razón... edenes de sueños. Ondas con longitud y frecuencia medible sobre el campo físico del aire vehicular que, cuando llegan al oído, producen el milagro inexplicable; el único que estoy dispuesto a creer en esta biología cautiva de lo aún desconocido.
Para los aficionados como yo, el retorno del portentoso Mike Oldfield con el excelso "Return to Ommadawn", desde ayer viernes en las tiendas, es un día de fiesta. 40 y tantos minutos fascinantes en dos piezas de intimismo mágico que atraviesan el tiempo neblinoso y te reblandecen las meninges. Puro delirio de los sentidos.
Aunque ya le conocía y seguía desde hacía tiempo, al igual que a Gwendal, un día hace años, de regreso de un juicio de Valencia un cliente, director de banda de música de pueblo, me habló de él extasiado como de un genio para los músicos profesionales. Al llegar a casa me puse a escuchar por enésima vez el Tubular II y, dese luego, el viejo músico tenía razón...
Mike Oldfield (1953) vuelve a sus orígenes en su vigésimo sexto álbum de estudio Return to Ommadawn, que sale a la...
RTVE.ES
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